Cuenta la leyenda que, en el momento de la Creación, todos los animales fueron puestos en fila, y cada uno a su turno, le pedían a Dios el atributo que más querían. El pavo real deseaba belleza; la gacela, rapidez; el león, coraje; el caballo, gracia; y así cada uno hizo su pedido. El gato, que era el último de la fila, escuchó bien todos los pedidos, y cuando llegó su turno pidió un poco de cada uno de esos atributos, sin dejar de lado ninguno.

dijous, 8 de juliol del 2010

FORO DE DUDAS Y CONSULTAS

¿TIENES UN GATO BARF? ¿QUIERES CONTARNOS EL TIEMPO QUE LLEVAS CON ESTA ALIMENTACIÓN? ¿TIENES DUDAS?

PÁSATE POR EL FORO.


TE ESPERAMOS!!!!

4 comentaris:

Angela ha dit...

Me parece muy interesante. Es algo que habia intuido que se podria hacer pero no me atrevia. Con tu informacion veo que tiene una experiencia que avala la posibilidad de ensayarlo. Es bastante laborioso tener que prepararles la comida pero si los beneficios son tantos es para pensarselo

Unknown ha dit...

Yo creo que laborioso debe ser, pero hecho un par de veces, sera como cocinar para nosotros... Me parece genial el blog, de verdad, a ver si cuando vuelva a tener gatos en casa puedo hacerlo, es que es mas... si un animalito esta enfermo, realmente,no debería ser perjudicial, debería ser incluso mejor esta alimentación. Pero claro, lo malo es la inexperiencia y la inseguridad que uno pueda llegar a tener. Y desde luego deberia tener todo el apoyo del veterinario, y que no se nos pongan perezosos que un buen profesional debe estudiar toda su vida, y una buena nutrición es prevencion, y esa debe ser el objetivo de todo veterinario.
Aleh, mas rollazo pero es que este tema es mucho tema.

Maite Sanmartín ha dit...

Gracias Ana, ya sabía que a ti te iba a gustar.

Lo de los animales enfermos es por tener bajas las defensas y su sistema inmunitario no podía hacer frente a las posibles bacterias como uno sano.

Maite Sanmartín ha dit...

En realidad laborioso no es porque cocinar más bien poco. Como todo es crudo... El único problema es que a las 6 y media decidan que tienen hambre. Y entonces te das cuenta que se te ha olvidado por enésima vez, sacar la carne la noche anterior.
Con los gatos brincando alrededor, maullando desesperados como si no hubieran comido en dos semanas, toca descongelar la carne en el microondas. Cosa que nunca me ha gustado pero no se aguantan y lo quieren ya. Cuando has acabado y decides volver a la cama te das cuenta que total no te queda ni media hora y que no vale la pena volver a acostarse. Pero por lo demás, no es laborioso. Si te organizas bien, claro.