Cuenta la leyenda que, en el momento de la Creación, todos los animales fueron puestos en fila, y cada uno a su turno, le pedían a Dios el atributo que más querían. El pavo real deseaba belleza; la gacela, rapidez; el león, coraje; el caballo, gracia; y así cada uno hizo su pedido. El gato, que era el último de la fila, escuchó bien todos los pedidos, y cuando llegó su turno pidió un poco de cada uno de esos atributos, sin dejar de lado ninguno.

divendres, 9 de juliol del 2010

¿POR QUÉ ME DECIDÍ POR ESTA ALIMENTACIÓN?

Varias veces me han hecho esta pregunta y la verdad es que vino un poco todo seguido. Lleida estaba poniéndose ceporrona y le daba r/d de hill’s, después de probar todos los light y de esteriliados; que en teoría les sacia y calma en hambre. Sin comentarios.
Roget tenía intolerancia a algo, posiblemente fuera el gluten. Revisiones, cambio de pienso, análisis de heces y no tenía nada; sólo que el pienso le sentaba mal.
Al principio de cambiar, el nuevo pienso le sentaba bien pero a las pocas semanas le volvía la diarrea. Le compré el Sensitive Stomach de hills, el sensible 33 de RC, el Real Carnivores de Advance… Al final el light de Hacendado parecía que le iba bien. Pero no era un pienso que me convenciera, de hecho lo han retirado de la venta. No sé qué pensar... Ahí fue cuando me empecé a dar cuenta que le sentaban mejor los piensos de arroz. Pasé entonces a los holísticos sin cereales: como Orijen. Orijen estaba demasiado bueno y Lleida alcanzó los tan temidos 5’5 k y, no quiero ni pensarlo, los 5’8 que llegó a pesar. Así que fuera Orijen. Quedaba una posibilidad, un pienso australiano, el ZiwiPeak. Sin cereales y con pinta de Corn flakes. El kilo a 20 €. Pero todo fuera por las diarreas. No gustó mucho. Por suerte sólo compré un paquetito de 400 gr y se lo voy colocando entre latas. De vuelta con los piensos normales y cada 3 días, latita de Integra Protect Intestinal para cortar las diarreas. Me faltó probar el i/d de hills pero me daba la sensación que iba a ser más de lo mismo.
A la vez, de casualidad, oí hablar de una dieta consistente en substituir una toma de pienso por lata. Me pongo a leer y oh, sorpresa, las latas tienen en proporción al kg, entre un 6 y un 8% menos de grasas que un pienso light y además no llevan cereales y lo que es mejor, le proporcionan el agua necesaria para evitar problemas renales o de piedras. Así que empecé a dar más lata que pienso y la gata dejó de engordar. Ufffffff, menos mal.
Supongo que buscando topé con alguna página donde se explicaba el tema de BARF. Así que me enganchó. He de decir que con anterioridad ya me había ido montando una tabla con las características de cada pienso buscando el más completo y adecuado y llegué a la conclusión de que no existía el pienso ideal sino ir mezclando entre varios.

Si alguien está interesado en la tabla, está aquí:


Poco a poco fui probando. La una desinteresada, el otro loco por las nuevas comidas. Empecé en febrero alternando con el pienso y en marzo sólo comían BARF. Desde entonces han pasado 5 meses y los gatos están estupendos. Para los que opinan que es caro, les diré que mi bolsillo se ha resentido más de los recortes salariales que de lo que me gasto en comida para ellos.
Empiezo a plantearme entonces si no tendré una vocación oculta hasta hace poco. ¿Que no me animaré a estudiar veterinaria…? Con lo de letras que yo he sido siempre. Lo que hay que oir, una arqueóloga reconvertida a profesora, apasionada de la veterinaria. Juas. Igual ahora que ya tengo una vocación cumplida es tiempo de plantearme hacer otras cosas… Arg, tengo 30 años y aún no sé qué quiero ser de mayor. Esto es grave.
Aunque si lo pienso puedo decir que compagino mis dos aficiones bastante bien: doy clases de sociales en lo que no sé (a veces dudo) si es un instituto o un zoológico.

1 comentari:

Anònim ha dit...

Entonces. ....tus gatos no comen pienso alguno al día de hoy? Gracias por tus aportaciones tan válidas